En esta Era Digital, una de las mejores estrategias para el desarrollo de la creatividad en el aula es el design thinking. Es importante exponer a las comunidades escolares a desarrollar esta estrategia para fomentar el desarrollo de la creatividad y la innovación desde las etapas iniciales hasta el bachillerato. Para practicar la estrategia de design thinking, existen 6 pasos que se deben completar:
1. Entender el problema
En primer lugar, les toca entender el problema y desarrollar empatía ante el mismo. Es sumamente necesario aprender de los individuos que estén viviendo el problema, saber cuáles son sus necesidades, emociones y urgencias particulares para partir de ellas.
2. Definir el problema e investigar
En segundo lugar, deben definir el problema en sus palabras e investigar. La investigación debe incluir diferentes elementos desde físicos hasta digitales para realizar un análisis que les ayudará a llegar al siguiente paso. Además, deben investigar y aprender sobre soluciones o acercamientos pasados de los cuales pueden aprender.
3. Idear
El tercer paso es idear. Una vez enfocado y establecido el problema, deben aprovechar esta etapa para pensar creativa y libremente, anotar todas las ideas y posibles soluciones por más descabelladas o imposibles que parezcan.
4. Crear el prototipo
El cuarto paso les invita a crear un prototipo o plan para resolver el problema expuesto. Este se nutrirá de la investigación realizada por ellos. Deberán tomar decisiones en equipo y llegar a acuerdos que contribuyan al desarrollo del mismo.
5. Probar el prototipo
Deben probar el prototipo y recibir la retroalimentación de otros. Si el prototipo no funciona, de manera colaborativa, analizarán el problema y expondrán nuevas ideas para solucionarlo. Es fundamental ver este proceso de manera positiva como un reto que los motiva a aprender.
6. Presentar su solución
Una vez finalizado entrarán al paso seis. En el sexto paso los alumnos presentarán su solución a una audiencia. Este paso es fundamental para que estos expliquen cuál fue el proceso para resolver el problema y sobre todo su reflexión sobre el mismo utilizando los artefactos y productos creados desde el comienzo del proyecto. Entre los artefactos pueden estar los siguientes: bocetos, cálculos, escritos, diagramas, mapas mentales, entrevistas, entre otros.
Para lograr un proceso enriquecedor, los profesores se convertirán en facilitadores que lanzan retos a los alumnos. Los alumnos se inspiran con materiales para trabajar mientras los facilitadores deben crear el andamiaje necesario para que los alumnos puedan resolver los problemas. Entre los materiales se encuentran los siguientes:
- Material para investigar
- Material para trabajar manualidades y prototipos
Los facilitadores trabajarán puntos de cotejo para verificar el progreso con el propósito de encontrar la solución del problema. Harán preguntas y brindarán recomendaciones para mejorarlo. Deben recordar que un problema puede tener más de una solución. Lo importante es el proceso que utiliza el alumno para encontrarlas mientras desarrolla otras destrezas.
En el próximo artículo le brindamos ejemplos de la implementación de esta estrategia por fases con alumnos de infantil en el Colegio Mater Salvatoris.