Por años, en mis colaboraciones con educadores he visto y analizado diversos perfiles sobre cómo cada uno de ellos ve la integración de la tecnología en el proceso de enseñanza aprendizaje. Los clasifico de acuerdo con el uso que mayormente le dan a la tecnología. A continuación defino estos perfiles y más adelante explico porqué recomiendo obtener la Certificación ISTE para educadores.
Perfiles del educador y su integración de la tecnología
Los usuarios productivos:
Encuentran la tecnología idónea para ser más productivos en tareas administrativas.
Los que manejan multimedios:
Imparten sus lecciones mediante el uso de presentaciones, imágenes y audios.
Los analistas:
Este grupo implementa actividades de valoración (assessment) con tecnología y aprovechan los datos para tomar decisiones que afectan el proceso de enseñanza aprendizaje.
Los aprendices:
Usan la tecnología y las redes para aprender de manera continua mediante la colaboración y la búsqueda de información.
Los usuarios expertos en el uso herramientas:
Siempre están al día buscando innovar y se destacan por ser expertos en el uso de aplicaciones.
Todos los usuarios tienen acercamientos muy necesarios e importantes a la hora de asumir el rol de profesor para integrar la tecnología en una sala de clases en cualquier formato. Sin embargo, lo ideal sería que en vez de tener grupos de educadores con perfiles específicos contáramos con un solo grupo donde todos los educadores cuenten con el mismo perfil, las mismas características y aptitudes en cuanto al uso de la tecnología en el proceso de enseñanza aprendizaje. Eso sí, persiguiendo un fin común, lograr transformar el proceso de aprendizaje mediante el uso efectivo de la tecnología. Definitivamente, esto parece fácil, pero como dice el famoso refrán: “Del dicho al hecho hay un buen trecho”. Lograr que los alumnos aprendan con tecnología requiere una preparación del profesor que va más allá del uso de aplicaciones, del manejo de la valoración o de la productividad. El uso debe ir atado a un objetivo concreto de aprendizaje. Por lo tanto, al momento de diseñar nuestras lecciones es medular tener el final en mente y hacernos la siguiente pregunta: ¿Qué queremos que nuestros alumnos sean capaces de comprender y poder hacer con el conocimiento adquirido? ¿Cómo podemos ayudarles a que impulsen su propio proceso de aprendizaje?
El balance entre la pedagogía y la tecnología es cada vez más necesario para cumplir este fin. Esta es una de las razones por las cuales los educadores deben mantenerse actualizados y empoderados.
El International Society for Technolgy in Education (ISTE) cuenta con Estándares para alumnos y para educadores, líderes y coaches, entre otros. Los Estándares para educadores de ISTE ofrecen una guía amplia que los ayuda a profundizar en su práctica, a promover la colaboración con sus compañeros y los desafía a repensar los enfoques tradicionales para preparar a los alumnos y lograr que estos impulsen su propio aprendizaje. La unión de los estándares ISTE para educadores logra el perfil ideal que empodera a un profesor de este siglo. Estos son:
- Aprendices
- Líderes
- Ciudadanos
- Colaboradores
- Diseñadores
- Facilitadores
- Analistas
Todos los que nos dejamos llevar por esta guía tenemos la oportunidad de mejorar nuestra práctica cambiando nuestro perfil. Sin embargo, en muchas ocasiones, no sabemos cómo desempacar o profundizar en cada indicador de los estándares para lograr la verdadera transformación. A base de mi experiencia puedo decir que por años implementé los Estándares de ISTE para educadores y para alumnos pero en realidad no profundizaba en ellos, aunque pensaba que sí. Hace dos años, con la meta de transformar nuestra práctica y colaborar con educadores de diversos colegios, un grupo colegas de Forward Learning nos embarcamos en la aventura de prepararnos para lograr la Certificación de ISTE para Educadores. Me enorgullece saber que soy una de los sobre mil educadores certificados a nivel mundial. Debo resaltar que fue un proceso riguroso, lleno de mucha reflexión en donde pudimos profundizar en nuestra práctica y en cómo podemos ser catalizadores de aprendizaje mediante la integración efectiva de la tecnología. Este proceso me empoderó y puedo decir que ha aportado grandemente a transformar mi práctica profesional y la de los educadores con los cuales colaboro.
Me ha ayudado a:
- Mantener viva la pasión por enseñar y aprender.
- Concienciar sobre la importancia de poner el aprendizaje primero y la tecnología en segundo lugar. Pasar de integrar a catalizar el aprendizaje en las comunidades que atiendo. Fusionar la pedagogía con la tecnología.
- Reflexionar continuamente sobre mi práctica, la toma de decisiones y los resultados de aprendizaje a base de datos.
- Valorar la importancia de colaborar, crear, innovar y co-aprender.
- Visualizar cómo lograr lo mejor de mis alumnos mediante el diseño de los entornos de aprendizaje incluyendo los no tradicionales, la facilitación efectiva y la personalización.
- Ejercer la nueva ciudadanía digital dejando atrás los miedos, siendo más proactiva y promoviéndola de manera transversal en las escuelas.
- Siempre establecer y compartir una visión sobre la tecnología en el proceso de enseñanza aprendizaje.
La Certificación ISTE para Educadores está diseñada para llevar a los participantes a repensar y rediseñar las actividades de aprendizaje que involucran a los alumnos en el aprendizaje activo y profundo. Está abierta para aquellos que trabajan con alumnos K-12 (infantil a bachillerato) o alumnos adultos y está centrada en la pedagogía no en herramientas o dispositivos. Se enfoca en cambiar la práctica educativa para profesionales inmersos en el área de la educación. Pueden participar educadores que ofrezcan cursos en la sala de clases (virtual o presencial), diseñadores instruccionales, especialistas en medios bibliotecarios, instructores de tecnología, entre otros. El programa combina 14 semanas de aprendizaje profesional con un portafolio que lleva un tiempo de preparación de seis meses y un proceso de revisión. Se profundiza en los siguientes temas:
- La definición de metas de aprendizaje profesional
- El poder del crowdsourcing
- La investigación y práctica educativa
- El diseño instructivo para la transformación del aprendizaje
- La evaluación y comprensión sobre marcos tecnológicos
- El manejo de la equidad en entornos de aprendizaje
- El manejo de la diversidad y accesibilidad
- La comprensión y la aplicación del pensamiento de diseño y pensamiento computacional
- El rediseño de lecciones con el Diseño Universal del Aprendizaje (UDL)
- La profundización en los estándares de ISTE para educadores mediante la creación de posibles artefactos para el portafolio
- Entre otros
Los educadores que obtienen la Certificación, pueden solicitar recibir hasta cuatro créditos de nivel de posgrado por su participación.
Esta certificación requiere lo siguiente de los participantes:
- Comprometer al menos 40 horas durante un curso en línea facilitado durante 14 semanas. Además, debe:
- Asistir a cinco reuniones sincrónicas.
- Completar tareas en línea.
- Durante los próximos seis meses, luego de completar el curso en línea, comprometer unas 40 horas para:
- Curar o diseñar artefactos.
- Enviar un portafolio a base de competencias.
Logrará la distinción de convertirse en educador certificado por ISTE al obtener una puntuación del 80% o más en la presentación final del portafolio. El proceso es riguroso, pero vale la pena.
En el artículo llamado La integración de la tecnología en la sala de clases después del COVID 19 expuse la importancia de continuar con la urgencia de aprender según lo hicimos durante pandemia. Me reafirmo en que la clave para lograr que nuestros alumnos se empoderen es que como educadores continuemos aprendiendo y más aún, pasemos de la urgencia a la agencia para que transformemos nuestra práctica profesional y ser catalizadores del aprendizaje de estos.